1. Cantidad que debes tener ahorrada
La mayoría de los bancos ofrecen una hipoteca del 80% del valor de tasación de la vivienda. Es decir, que si, por ejemplo, tienes interés en una casa con un precio de 200.000 €, debes tener ahorrada una cantidad de 40.000 € (que supone el 20% del total) para pedir el préstamo del resto de la vivienda.
2. Sueldo mínimo exigido por el banco
Sí, muchas veces el banco exige que la persona tenga un sueldo mínimo para garantizar que pueda pagar los plazos de la hipoteca. De hecho, hay casos en los que la entidad financiera ofrece condiciones diferentes para una misma hipoteca a personas que ganan diferentes cantidades al mes. Además, el banco también analizará las deudas que tengas pendientes. En definitiva, la entidad estudiará a fondo tu solvencia.
Entre los consejos clave para pedir una hipoteca está el tener ahorrado el 20% del precio de tasación y leer detenidamente las comisiones que te cobra el banco.
3. Tipo de interés: ¿fijo o variable?
Seguro que entre las cuestiones a tener en cuenta al pedir una hipoteca ya te has preguntado qué tipo de interés debes solicitar, si el fijo o el variable, y cuáles son los pros y contras de cada uno. El tipo de interés fijo se establece en el contrato y se mantiene siempre estable, independientemente de los vaivenes del euríbor. Sin embargo, el variable se calcula siempre sumando la cifra del euríbor y el diferencial de cada entidad.
En los últimos años las hipotecas de interés fijo lo han recortado bastante, quedando en algunos casos en solo un 1,5%, mientras lo habitual hace tiempo estaba entre el 4 y el 5%. La desventaja de la variable es que es más arriesgada, pero la ventaja es que puedes llegar a pagar muy pocos intereses en determinadas épocas.